FALTA DE FE
Sí
aún cuando no creo
hay un lugar en mí
inaccesible a la incredulidad
una parcela de gracia silvestre
una tozuda reserva
impenetrable
un dolor intocado durmiendo en el cuerpo
música que construye su nido en silencio.
EL MOMENTO DE LA RECONCILIACIÓN
Toma en tu mano la hostia gris del día
porque el momento de la reconciliación ha llegado
Que haya reconciliación entre
la manzana y el cuchillo
el árbol y el fuego
el día y la noche
la risa y el llanto
la nada y el cuerpo
Que haya reconciliación
entre la soledad y la soledad.
UNA ORACIÓN QUE SERÁ CONTESTADA
Señor déjame sufrir mucho
y luego morir
Déjame caminar a través del silencio
sin dejar nada atrás ni siquiera el miedo
Haz que el mundo continúe
deja que el océano bese la arena igual que antes
Deja que el pasto permanezca verde
para que los sapos puedan esconderse en él
para que alguien pueda enterrar su rostro en él
y llorar por su amor
Haz que el día se alce brillando
como si no hubiese más dolor
Y deja que mi poema se levante claro como una ventana
topado por la cabeza del abejorro
Anna Kamienska es una extraordinaria poeta polaca. Vivió
entre 1920 y 1986. Ha sido muy reconocida por sus colegas
premiados con el Nobel, como Szymborska y Milosz. Su re-
ligión es dulce y habita entre los dos Testamentos. Son muy
ricos sus cuadernos de anotaciones, de modo que próxima-
mente intentaré traducir fragmentos de ellos.
FUENTE
Anna Kamienska. Astonishments. Selected Poems. Para-
clete Press, 2007.
Versiones del inglés: Robert R. Rivas (c)
2 comentarios:
Es tan bello releer poemas, refrescan mi alma siempre en busqueda, que este año que viene sea esplendoroso, con mucho amor y salud amigo Robert
Hola Carmen. Aunque "esplendoroso" me suena a una exageración tremenda,
te agradezco el buen deseo. Que sea un buen año para vos también. Y gracias por tu acompañamiento, que es valioso para mí.
Publicar un comentario