Foto: RRR
También nosotros dudábamos
Y la búsqueda fue extensa
Y en realidad no estaban escondidas:
Como tribus perseguidas, buscaban lugares difíciles
de alcanzar
Solo eso
Y entonces no nos acercamos demasiado
Solo lo necesario para comprobar que, en efecto, hablan
Las encontramos en animada charla
No entendíamos, por supuesto, lo que se decían
Pero sí sus tonos, sus risas, sus burlas amistosas
Lo más interesante de escuchar una conversación
entre las piedras de Gwithly
es que alcanza para desechar para siempre las absurdas
ridículas, estrambóticas ideas
que se tienen acerca de las piedras
Y, por arrastre, de todas las demás cosas existentes.
1 comentario:
Amo las piedras y me encanta este poema, es muy decidor!
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