miércoles, 10 de noviembre de 2021

TAAVI JJUAQ

  Sebald recuerda

  la primera vez que fue testigo

  de una poeta groenlandesa

  'viva en la carne'

  'formando sonidos

  que no le parecían

  otra cosa que dobles

  vocales y dobles

  vees resbalando arriba

  y abajo por la escala de

  sonidos de su plumoso 

  lenguaje taavi

  jjuaq dice ella la

  gran oscuridad y

  levantando su brazo la

  centelleante luz'.

  Y ese recuerdo disparó

  la noche en la que Jerome

  Rothenberg 

  el etnopoeta

  interpretó

  para un escaso público

  entre el que me encontraba

  un poema de los indios

  americanos

  con las inflexiones,

  los gritos, soplidos, los movimientos

  rítmico-convulsos

  del cuerpo

  como los que haría

  sin saber sabiendo

  un animal inspirado

 

  Y ambas noches pasaron a

  mezclarse

  entre las demás noches como

  cartas marcadas

  en el mazo

  como el latido de menos

  o de más

  en la larga hilera de los

  pulsos

 

  porque es el cuerpo

  siempre, al final

  es en el cuerpo donde

  pasan las cosas

  que la mente

  raramente merecedora

  de llamarse

  "el espíritu"

  presencia y 

  siente


  es hasta raro estar diciéndolo y

  un tanto obvio


  pero eso es todo lo que hay

  realmente


  emociones

  que han hecho centellear

  al cuerpo

  para luego transformarse

  en barajas marcadas,

  en las tinieblas de ese cuerpo

  y pasar a llamarse

  "recuerdos"


  o emociones que

  a veces 

  ah

  mágicas y raras veces

  intercambiamos

  

No hay comentarios: